Menosoquista y Dramapoor
Quiero ser menosoquista y dramapoor. Para que nos entendamos: lo contrario a masoquista y dramaqueen.
Me apetece sufrir cada vez menos. Lo justito, lo inevitable. Que yo veo que hay gente a la que le va el sufrir todo el día, que parece que vayan buscando excusas para indignarse a cada momento. Y eso no ha de ser bueno para la salud.
No, no y no.
Para lograr mi objetivo tres Musas han compartido conmigo su sabiduría, y a su vez yo lo hago con vosotrxs.
Primer consejo: puestos a sufrir, hacerlo como lxs expertxs del BDSM. La Musa recomienda hacerlo con gozo, reglas y, sobre todo, conocimiento.
Nada mejor que sufrir como aquellxs que saben disfrutarlo profundamente pero también cuándo parar y pasar a otra cosa, tabicando parcelas. Si no sabes parar no sabes sufrir bien.
Y lo mismo para lxs sádicxs del día a día, que no son pocxs y dan bastante por saco. Para ellxs este tip: sólo infligir el dolor adecuado y soltar el látigo a tiempo. Tendinitis cero.

Angelita Lismán hizo una apuesta: por cada queja tendría que dar una cuchara. Perdió varias cuberterías.
La segunda Musa nos invita a canalizar el drama a través del arte. Según ella, quien más quien menos lleva una soprano histriónica dentro, o un actor ególatra (cámbiense los géneros indistintamente). Lo que en lenguaje popular se conoce por “todxs somos más o menos intensitxs”. ¿Qué hacer según ella? ¿Meditación y crecimiento personal? ¡No! Apuntarnos a canto o actuación y así dejar de colapsar a nuestros entornos.

Susana Politana consideraba que sí era lícito sufrir y dramatizar en las rebajas con tal de conseguir el mejor producto.
La tercera Musa nos señala algo fundamental: la importancia del contexto. Según su experiencia las cosas no son acertadas o desacertadas, simplemente tienen sentido o no en función del contexto. Así, puestos a sufrir y dramatizar, nos recomienda hacerlo indistintamente en mazmorras y teatros (no considerarlos sinónimos, por favor), donde podremos dar rienda suelta a nuestras pulsiones y también ser valoradxs.

José Máforo recuerda a todxs lxs sádicxs que es respetable no creer en algunxs mitos, pero de ahí a recrearse…
Gracias a estas tres claves ser menosoquista y dramapoor parece ser una tarea asequible, ¿no creéis? Así que si también os apetece sufrir lo justito, recordad: como profesionales, acotado y en el lugar oportuno.
¡Sed muy Felices!

Como algunxs ya sabéis, yo he canalizado parte de mi histrionismo como colaborador del programa Taquilla Inversa, de l’Hospitalet Televisió. Mi sección, “Kongsultorio Influencer”, aquí (link) .
Seguimos en contacto vía Instagram (@agustinkong)
Para saber más sobre mis libros, un click aquí.
🙂 Grupo de Hong Kong Blues en FACEBOOK.
Fuera el sufrimiento, fuera la intensidad mal entendida… con tu guía seguro que se creará un tsunami de menosquistas y dramapoors. No podemos más que agradecértelo: menos dramas mejor sociedad.
Tú eres un ejemplo de lo que nos debería rodear 🙂 ¡Besos enormes!
Querido HKB: yo intento desterrar el sufrimiento de mi vida, aunque no es fácil, por eso sufro lo necesario. Aprovecho para felicitarte por enésima vez de otro de tus muchos triunfos!.
Un abrazo!!
Siempre sabia. Te adoro y admiro. Gracias por tus felicitaciones.