Menorca se ha convertido en uno de los destinos predilectos de quienes buscan el descanso. Entre sus maravillosas playas, fantásticos paisajes e ideal gastronomía este destino es elegido todos los años por cientos de miles de turistas que quieren bañarse en sus aguas cristalinas. Es por esto que Menorca es un destino al alza, al que no debemos olvidar en ningún caso. La multitud de idílicos rincones con los que
Slow Menorca o descansar descubriendo, comer sonriendo, aprender disfrutando. Infinitivos y gerundios unidos entre colores y sabores Conocer Menorca pasa por descubrir su variada gastronomía fruto de pueblos y culturas que a lo largo de su historia han habitado la isla. Famosa en el mundo entero es su salsa mahonesa, probablemente en la cocina menorquina desde antes del siglo XVII, pero fue gracias al duque de Richelieu cuando traspasó
Turismo gastronómico, en torno al vino, a los aceites… el turismo de aventura y ahora también el turismo de calzado. Conocer las fábricas por dentro es la mejor manera de aprender a valorar el trabajo, más aún cuando se trata de artesanía pura. La fábrica de avarcas Ría, en Ferrerías, abre sus puertas a todo aquel que quiera conocer los secretos del calzado más famoso de la isla de Menorca.
En 1967 Guiem Armengual, pescador y “mestre d’aixa”, construyó artesanalmente el Adamastor. Era tan grande que tuvo que derribar el muro de su taller para poderlo sacar una vez terminado. Estamos en la isla de Menorca donde los llaüt son embarcaciones tradicionales de vela latina para la pesca del arrastre. Hoy en día prácticamente no se utilizan para la pesca pero son objeto de deseo y emblema de las
El arroz tres delicias, el chop suey o la salsa agridulce nos llevan a pensar en la gastronomía china, pero hay vida más allá de los rollitos primavera. Tan gigante como el propio país es su gastronomía, a pesar de haber sido muy reducida y limitada en occidente. Cada vez más, nuevas apuestas gastronómicas fijan su mirada en China por la gran oferta y variedad que ofrecen sus platos. Shumin
Dicen en Menorca que el queso de Mahón se hace en todos los lugares de la isla, menos en Mahón. Sin embargo, así se conoce su Denominación de Origen gracias a que era desde el puerto de Mahón desde donde ya en el siglo XVII se comercializaba hacia importantes ciudades europeas del Mediterráneo. De ahí que lo llamaran el queso de Mahón. En mi reciente visita a la isla
